Engañados...

Hablar de esto posiblemente sea lo mas difícil de lo que he hablado hasta ahora.

Risas a carcajadas, buen humor, bienestar, refuerzo de la autoestima... ¡Plenitud!

Frustración, tristeza, impotencia, búsqueda de nuestros caminos... ¡Vacío!

Ayer noche recibí una llamada de una más que amiga. Me dijo que se separaba de su marido, alguien a quien también considero amigo. En un principio pensé, “joder que putada!!”. A los pocos segundos reaccioné y pensé todo lo contrario. Recuperareis el aliciente y volveréis a tener una oportunidad. Volveréis a sonreír y recuperareis vuestro buen humor…

 “Sabed que el dolor, el vacío, el nudo en el estómago os van a acompañar durante cierto tiempo. Tenéis que ser consecuentes (o conscientes, que también me vale) con vuestra decisión y sobretodo, no faltaros el respeto NUNCA!!. Tenéis que llevar el duelo como mejor os sintáis, pero ante todo, respetaros y que jamás haya reproches… en ninguna dirección. Simplemente no ha funcionado...”

Hoy, hablando con el marido, un gran tipo, me he dado cuenta, de que realmente no era una cuestión de amor. Se adoran, lo sé. Pero la realidad no es que sea una cuestión de amor hacia la pareja, si no de amor hacia uno mismo. Hoy en día además de amarse, hay muchos otros factores que condicionan nuestras vidas… nuestras relaciones... Y sinceramente, creo que hemos perdido el punto de vista, o dicho de otra forma, quizás esto no sea como nos lo habían pintado... Hemos aprendido mal la lección!!

Ya lo hablé en su día, y cada día lo tengo mas claro. Somos DAÑOS COLATERALES de ésta sociedad en la que nos han tenido engañados como a niños, en la que nos han puesto un caramelo en la boca y otro en el horizonte (el objetivo), haciéndonos pensar que eso es lo que realmente queríamos… Como burros a por su zanahoria… Y con un único fin… ¡¡alcanzarlo!!. Pensando que una vez alcanzado, todo sería el mundo "FELIZ" que siempre hemos imaginado...

Pero sin duda NO. ¿Hasta dónde estamos dispuestos a llegar?. ¿Cuanto tenemos que ceder, que renunciar, que sacrificarnos?. Y NO hablo del amor, ni de la pareja, como estos días atrás!!. Hablo de NOSOTROS, de nuestra persona. ¿Hasta dónde?. 

Lo cojonudo de esto, es pensar que algún día vamos a alcanzar "ese" objetivo… Y que nos vamos a comer la jodida zanahoria!!. Caminamos hacia ella día tras día y sin embargo, día tras día, permanece a la misma distancia… Inmóvil!!. Como una puta estatua (con forma de zanahoria), eso si, esperándonos en nuestra jodida imaginación. Pero nunca la vamos a alcanzar. ES INVENTADA!! O mejor dicho, alguien se la ha comido ya!!

La crisis que tenemos TODOS, vale, muchos!!!… (sé que habrá quien se descojone de mi, de mis palabras y de mi forma de pensar…), NO es una crisis económica. ESA ES SOLO LA PUTA EXCUSA. Es una crisis PERSONAL, y como consecuencia, familiar, de pareja…. SOCIAL.

Repito, ¿donde estamos, dónde queremos ir y con quien?... De esto ya he hablado también en otras ocasiones… Y no me voy a cansar de hacerlo…  ¿Estamos dispuestos a seguir por éste camino?. ¿A seguir creyendo que mañana será otro día y que por generosidad de los Dioses nos va a “tocar” la lotería y nos va a cambiar de un día para otro todo lo que realmente somos?.

Es muy difícil creer que eso vaya a suceder… Pero más difícil es escuchar a un amigo decir que pierde a su mujer porque no es capaz de encontrar su camino con más años que yo... Que todo el esfuerzo que ha realizado por mantenerse en pié, ahora se ha desmoronado… Y que tiene que doblar las rodillas. Que ha entrado en BUCLE. Y que no la puede hacer feliz. Ella, lo sabe… Lo sabía. Se veía venir… Y ya no se pueden ayudar. Es muy duro ver como otra vez más, se han perdido…

Insisto que no es una cuestión de amor. SE ADORAN. Es una cuestión que deberíamos pensar mas de uno, ya que TODOS estamos embutidos en ese circulo vicioso, dentro de su mismo BUCLE…

Un bucle que nos tiene en la constante búsqueda de nuestro camino… (insatisfacción por la búsqueda de la felicidad). Con el punto de mira puesto en nuestro objetivo. Nos han hecho creer que “ese” es nuestro objetivo…

Lo más triste es, que todos sabemos que estamos equivocados. Sin embargo, seguimos subidos en ese mismo barco del que otro día también os hablé y del que nadie salta para salvarse… Es muy cómodo pensar que prefiero engañarme fingiendo felicidad que mojarse, simplemente abriendo los ojos. Es muy cómodo vivir mientras nos va “relativamente” bien y no pensar en el día que deje de irnos… Es la postura mas cómoda, sin duda, ¿Para qué?... y… ¿Para que complicarnos, verdad? …Si estamos guay como estamos!!

Estamos viviendo momentos duros. Si no son ellos los que se separan, son negocios que se cierran, son familias en la puta calle, son noticias que nos entretienen pero ninguna buena, son… Son no, ¡¡Somos!! Unas putas marionetas de esta jodida sociedad (tu, yo, vosotros, nosotros…) que nos auto-distraemos hablando de la prima de riesgo, o de la deuda nacional… o de la puta madre del tal Bárcenas o del tal Shaolin, (cada día una) mientras seguimos esperando que algo cambie cada día que bajamos el pie derecho de nuestro jodido pero placentero colchón… (ni se os ocurra empezar el día con el pie izquierdo... a ver si de verdad van a “mejorar” las cosas) ......¡¡Joder!!

Insisto, es muy difícil hablar de esto (sobre todo pensarlo). Esta crisis, posiblemente sea la lección más dura, y quizás sea el momento de valorar si realmente lo aprendido hasta ahora es lo correcto. Es muy duro ver como nuestro entorno se desmorona cada día un poquito mas… y mientras, seguimos preocupados de nuestro trabajo, de recaudar PARA solo PAGAR, de subsistir a cambio de 15 minutos al año... de paz!! Pero lo que sin duda si que es duro, es pensar que no soltamos una puta carcajada por que nos sale del alma… desde ya no sé ni cuando!!! ¿Mientras a mi me vaya bien... para qué cambiar, verdad?

Solo os pongo un ejemplo. Hasta hace no muchos años, cada Año Nuevo brindábamos por que habíamos dejado uno atrás y esperábamos que el que viniera fuera como poco igual o un poco mejor… Pensar si los últimos años ya no hemos brindado por eso… Si no por la esperanza de que de verdad mejoren las cosas.

¿Es una cuestión económica? NI-DE-CO-ÑA!!

Me duele mucho ver la pasividad de la gente. Ver que tragamos, tragamos y tragamos. Ver que todo cae por su propio peso o por el peso de lo que no es propio... Y sobre todo, me duele tener que decir ADIOS!!

P.D.: Por primera vez desde que os escribo, no penséis que lo hago por un problema mío. Yo estoy bien (desde hace tiempo), gracias por vuestro interés!!. Pero girad la cabeza…

Siento un huevo vuestra ruptura. Ojalá dentro de poco os vuelva a ver sonreír!!